После выхода из ЮНЕСКО США грозятся выйти из МСЭ

Michael O’Rielly, Comisionado de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), amenaza con la salida de Estados Unidos de la Unión Internacional de Telecomunicaciones ya que a su juicio necesita una revisión fundamental, mayor transparencia y reformar sus procesos.

El Comisionado de la Comisión Federal de Comunicaciones (Federal Communications Commission, FCC), Michael O’Rielly, ha puesto sobre la mesa el malestar de los de Estados Unidos con la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT/ITU) en relación al desarrollo del 5G y la banda de 28 GHz. Frente a la política de la agencia de las Naciones Unidas que regula el espectro radioeléctrico y las órbitas satelitales, la FCC pretende abrir espectro de banda C reservado para satélites para permitir aplicaciones inalámbricas terrestres de 5G.

Esta amenaza no es nueva. De hecho, el 15 de enero de 2016, tras el mal resultado para Estados Unidos obtenido en la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones de 2015 con respecto a la banda de UHF y, muy en particular, con respecto la continuidad de la TDT en Europa (recordemos que se garantizó en toda la Región 1 -que incluye Europa, África y Oriente Medio- al no volver a abordar la utilización del espectro en 470-960 MHz hasta la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones de 2023), el propio Michel O’Rilley publicó un artículo en la propia página web de la FCC en la que se apuntaba dicha posibilidad. Ello evidenciaba la escasa o nula neutralidad tecnológica de la FCC al hacer suya exclusivamente la posición de los operadores de comunicaciones móviles y manifestar su malestar por la resolución 235 de la CMR-15, al no lograr conseguir sus objetivos. No debe olvidarse que la FCC también tiene encomendado, por ley, atender a los intereses de los radiodifusores.

En esta ocasión, ha vuelto a prevalecer la mencionada posición y O’Rielly ha llegado a amenazar con una retirada de los Estados Unidos de la UIT, asegurando que este organismo independiente “necesita una revisión fundamental. Claramente, tiene pendiente desde hace tiempo trabajar con mayor transparencia y la reforma de sus procesos. Pero es más que eso: la UIT está siendo utilizada actualmente por gobiernos autoritarios para impulsar sus agendas miopes en detrimento de otros países, incluido Estados Unidos, y el avance tecnológico. Es necesario aprobar reformas estructurales para garantizar que la UIT siga siendo neutral en cuanto a la tecnología y se centre en su misión principal en lugar de involucrarse en otras actividades como la regulación de Internet”.

“El hecho de no seguir este camino probablemente conduzca a que EE.UU. cancele su participación en la UIT en su totalidad o en parte, lo que probablemente fracture la organización y conduzca a su desaparición funcional. Ningún individuo con mentalidad de libertad debería querer este resultado porque, si somos parte de la organización tendremos, al menos, la oportunidad de luchar por los corazones y las mentes de la comunidad mundial”, ha afirmado O’Rielly.

El directivo de la FCC también ha mostrado su malestar con el sistema de elección de cargos. “Es irónico que seamos el segundo mayor contribuyente de fondos a la UIT, pero solo un Secretario General era natural de Estados Unidos en 150 años y el último director del sector estadounidense fue hace aproximadamente 25 años. Las profesionales de los Estados Unidos deben estar dentro de los niveles más altos de la dirección de la UIT”.

La FCC ha respaldado una serie de estudios de cara a abrir el espectro de banda Ka para la tecnología inalámbrica 5G, argumentando que las redes terrestres y satelitales pueden compartir el espectro. La negativa de los gobiernos de la UIT en 2015 a permitir tales medidas parece haber enfurecido a la Administración de Donald Trump.

Además, la FCC quiere obligar a los operadores satelitales a compartir la sección de banda C de 3,7-4,2 GHz en Estados Unidos. Los operadores de satélites han asegurado en multitud de ocasiones en la última década que la débil señal de la banda C emitida por los satélites a 36.000 kilómetros sobre el ecuador sería superada por cualquier señal inalámbrica terrestre que funcione en las mismas frecuencias en la misma área geográfica.

Hace apenas unos días Estados Unidos anunció que se retirará de forma efectiva de la Organización de las Naciones Unidas para Ciencia y la Cultura (UNESCO) a partir del 31 de diciembre. Washington, según un comunicado, “desea seguir vinculado a la Unesco, pero solo como Estado observador no miembro. La retirada se debe al al impago de las contribuciones de los países miembros de la UNESCO, la necesidad de reformar de la organización y el ambiente antiisraelí en el organismo”.