La excelente fotografía digital de Álex Catalán en ‘La isla mínima’ logra un Goya
La película, Goya a la mejor fotografía, se rodó en digital con una cámara ARRI Alexa que respondió a la perfección a pesar de las condiciones de humedad, calor y frío.
Álex Catalán recibió el Goya a la mejor Dirección de Fotografía por La isla mínima, la película, sin duda, triunfadora de la noche. Para este profesional, de larga carrera, es su primer Goya, que recibe con orgullo y alegría por un trabajo en el que “todos hemos dado lo máximo y el resultado está ahí”.
En su haber cuenta con haber estado al frente de la fotografía en más de cuarenta producciones, entre las que destacan sus últimos trabajos Anochece en la India, ¿Quién mató a Bambi?, Grupo 7, La voz dormida, También la lluvia й Habitación en Roma.
Catalán tuvo que enfrentarse al reto de hacer de las marismas del Guadalquivir un personaje más de la trama y captar en un juego de luces, sombras y aguas el misterio que destila la historia. “Lo primero que pensé cuando me plantearon el proyecto era el poco tiempo que teníamos y el escaso presupuesto. El tema, la historia y el sitio eran muy agradecidos”.
La película se rodó en digital con una cámara АРРИ Alexa que respondió a la perfección a pesar de las condiciones de humedad, calor y frío porque “se trata de una marca fiable. He de decir que a mí me gusta más rodar en celuloide porque en una comparativa real estética ofrece un preciosismo mayor. Sin embargo, las ventajas del digital empiezan a ser mayores que los inconvenientes”.
Ante la pregunta de si hubiésemos visto otra isla con fotografía en celuloide, Alex catalán no tiene dudas. “Evidentemente sería otra ya que se notarían más las texturas, el polvo, los tonos de piel… La sensación cinematográfica sería de mayor calidad”, confesó a Panorama Audiovisual.
Una larga trayectoria
La larga carrera de este director de fotografía, comenzó a mediados de los ochenta cuando su hermana, foquista de profesión, le dio la oportunidad de trabajar como auxiliar de cámara en el rodaje de un anuncio de la ONCE en la Puerta del Sol de Madrid, allí descubrió la intensidad de un rodaje profesional.
Inicio su actividad laboral como cámara e iluminador de TVE en Sevilla, donde trabajó 12 años. Asistió a escuelas de Madrid, Londres, Los Ángeles y Cuba. Su relación e interés en el mundo del cine fue creciendo, compartiendo sus inicios con el director Alberto Rodríguez, con el que ha continuado trabajando desde entonces.
Antes de llevarse a casa este Goya, Álex Catalán logró convencer también con su fotografía al Jurado de la última edición del Festival de San Sebastián.
En la actualidad, está a la espera del estreno de su último trabajo A perfect day, con Fernando León de Aranoa como director.
Acceso al ESPECIAL GOYAS 2015.
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