La Agencia Estatal de Radiocomunicaciones... en el aire

Creada por la Ley 32/2003 General de Telecomunicaciones, el Proyecto de Ley General de la Comunicación Audiovisual, de 5 de enero de 2010 establecía, por vez primera, el 1 de junio de 2010 como fecha tope para la constitución de la Agencia Estatal de Radiocomunicaciones… ¿o era un “error de transcripción”? Con su creación en el aire, Barcelona, Vigo, Valencia y Sevilla se perfilarían como alternativa a Madrid para albergar su sede.

La Agencia Estatal de Radiocomunicaciones se creó el virtud del artículo 47 de la Ley 32/2003 General de Telecomunicaciones, con el objetivo de mejorar la gestión del dominio público radioelectrónico, tanto en sus aspectos de eficiencia y armonización de usos, como de acceso a los recursos radioeléctrico. Adscrita al Ministerio de Industria, Turismo y Comercio a través de la Secretaría de Estado de las Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información tendría por objeto la ejecución de la gestión del dominio público radioeléctrico.

Entre sus competenciaS destacaríaN la propuesta de planificación, gestión y administración del dominio público radioeléctrico, así como la tramitación y el otorgamiento de los títulos habilitantes para su utilización. También tendría competencias en la inspección de instalaciones radioeléctricas en relación con los niveles de emisión permitidos, identificando y localizando las interferencias perjudiciales y perturbaciones de los sistemas de radiocomunicación. Según lo inicialmente previsto, la Agencia, aún sin potestad sancionadora, propondría también la incoación de expedientes sancionadores siendo además competente para redactar estudios e informes y asesorar a la Administración General del Estado en todo lo relativo a la gestión del dominio público radioeléctrico.

Pese a un marco tan detallado, la realidad es que siete años después la Agencia Estatal de Radiocomunicaciones sigue en el aire. El último intento de impulsarla se reflejaba en el Proyecto de Ley General de la Comunicación Audiovisual, de 5 de enero de 2010. Curiosamente mientras que en el texto publicado en el Boletín Oficial de las Cortes Generales del 25 de enero dejaba constancia de que “la constitución efectiva de la Agencia Estatal de Radiocomunicaciones tendrá lugar antes del 1 de junio de 2010 en el momento de la aprobación de su Estatuto”, días más tarde se modificaba incomprensiblemente el texto para hacer desaparecer esta fecha.

Una Agencia en eterna espera

Aprobada en 2003, fijada su fecha de constitución mediante el Proyecto de la Ley General de la Comunicación Audiovisual y posteriormente retirada del texto final por un “error de transcripción”… la verdad es que a día de hoy no se sabe ni dónde ni cuándo comenzará a operar la Agencia Estatal de Radiocomunicaciones. Para buscar una respuesta a este caos, habría que remontarse cuatro años atrás cuando la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT), por aquello del juego político, se trasladó, con total oposición de sus trabajores y prácticamente de la noche a la mañana, a Barcelona. Siguiendo esta línea descentralizadora, mientras que Presidencia sería partidaria de que la nueva Agencia tuviera su sede en Madrid, desde Industria se están barajando otras ciudades como Barcelona (sede de la CMT), Vigo, Valencia o Sevilla. Ante esta posibilidad, el personal de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones (SETSI) ve peligrar su puesto de trabajo y anda revolucionado ante la posibilidad de que una nueva carambola política como la que originó el traslado de la CMT termine ubicando la Agencia, que prevé dar empleo a unos 200 profesionales, fuera de Madrid.

Con el proyecto de la Ley General de Comunicación Audiovisual en trámite parlamentario, ahora en el Senado y una vez cerrado el periodo de enmiendas, todo parece indicar que la fecha del 1 de junio de este año quedaría en el aire, incluso se habla ya de 2015 coincidiendo con el reparto del dividendo digital.

Mientras, en mitad de este desbarajuste legislativo y haciendo equilibrio entre las competencias autonómicas y del Gobierno central, cientos de emisoras piratas de radio y televisión siguen emitiendo a sus anchas a menos de un mes del apagón… ¿quién le pondrá el collar al gato?