Comienza el rodaje de ‘El ritual de Lily’, película en la que Manu Herrera recupera el cine de terror de los 90

O produtor The Room Films nace fundada por el director Manu Herrera para dar vida a su segundo largometraje: ‘El ritual de Lily’, un largometraje en torno a la brujería con marcadas influencias noventeras que ya se rueda en Madrid.

Con guion de Manu Herrera y Javier Fernández Moratalla, El ritual de Lily recupera el espíritu del cine de terror de los 80 y 90 protagonizada por Maggie García (Los Protegidos: ADN), Patricia Peñalver (Poliamor para Principiantes, El Final del Camino), Eve Ryan (Culpa Mía, Mía es la Venganza) sim Elena Gallardo (Paraíso, O povo). En palabras de Herrera, la película tiene por objetivo “restaurar la profundidad y la intensidad que caracterizaban el género” aunando un estilo visual potente con una narrativa “rica y compleja”. “Este proyecto no solo rinde tributo al género terrorífico, sino que también lo redefine para la audiencia moderna”, sentencia el director, guionista y productor, quien ha creado recientemente la productora The Room Films.

Diplomado en diseño y formado en postproducción y dirección cinematográfica, Herrera ha trabajado en diversas productoras de renombre como Telson, Globomedia, Boomerang TV, o Signo Producciones. Su primer largometraje, Hambre, un proyecto de cine independiente de terror, ha sido ampliamente premiado en el circuito de los principales festivales de género de todo el mundo, recibiendo más de 50 premios tanto al mejor film de terror, como a la mejor dirección, fotografía o BSO entre otros. Actualmente, es el director de la post-productora The Room VFX, donde ejerce como director creativo y diseñador de VFX en numerosas series y programas de televisión.

Esta é a sinopse de El ritual de Lily: “Equinoccio de Otoño, fin del Siglo XX. Cuatro amigas viajan a una casa aislada en mitad del bosque para realizar un ritual de iniciación a la brujería y así completar el círculo de los cuatro elementos. Lily una joven veinteañera pálida e introvertida recién llegada al grupo, ha sido elegida para representar el elemento aire. Pero lo que comienza siendo un ritual de brujería blanca en armonía con la naturaleza, pronto acabará convertido en una diabólica pesadilla. Lily no se imagina que el verdadero propósito es otro y que realmente el sacrificio es ella misma”.

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