Los documentales más polémicos se estrenarán en el Festival de Sevilla
El Festival de Sevilla, que tiene como invitada este año a la cinematografía holandesa, exhibirá algunos de los documentales más polémicos del año como ‘Armadillo’, del danés Janus Metz (Gran Premio de la Crítica en el Festival de Cannes), o ‘Draquila, L’Italia che trema’ (Draquila, la Italia que tiembla)’, cuarto largometraje de la cómida y realizadora italiana Sabina Guzzanti.
La ganadora del Gran Premio de la Crítica en el último Festival de Cannes, Armadillo cuenta cómo el idealismo choca contra la realidad durante la construcción de la paz y la democracia en Afganistán. Por su parte, Draquila, L’Italia che trema (Draquila, la Italia que tiembla) es un penetrante informe, con Berlusconi como protagonista, sobre los acontecimientos que rodearon el terremoto de L’Aquila. Ambos documentales formarán parte de la Sección Eurodoc del Festival de Sevilla que tendrá lugar del 5 al 13 de noviembre.
La película documental Armadillo, del danés Janus Metz, que recibió el Gran Premio de la Crítica en el Festival de Cannes, es una peligrosa odisea hasta el corazón de la guerra. Se trata de una exploración psicológica basada en la observación de unos jóvenes soldados que viven situaciones extremas en la guerra de Afganistán. La cinta pretende mostrar los efectos de la guerra en la mente y en el comportamiento de los soldados.
Armadillo es el nombre de uno de los puestos avanzados daneses en la provincia de Helmand, en Afganistán, donde el realizador y su equipo tuvieron oportunidad de rodar. El resultado ha sido un material único que no se ha visto anteriormente en ningún documental.
Janus Metz, ganador de numerosos premios por documentales como Ticket to Paradise y Love on Delivery, películas acerca de temas controvertidos como la emigración; los matrimonios de conveniencia; la prostitución y la globalización, presenta en ‘Armadillo’ un drama psicológico protagonizado por dos soldados.
El primero es un idealista sensible, con complejo de inferioridad, al que atrae y repele el segundo, lleno de cinismo y sarcasmo, que busca subidones de adrenalina enfrentándose a la muerte. Los dos son jóvenes con ganas de aventura, salen de Dinamarca para su primera misión con el fin de ayudar a los afganos “en nombre de una causa superior y de la idea del bien común. Pero la lucha es cada vez más sangrienta, y el miedo, la paranoia empiezan a afectar a las opiniones y decisiones de los soldados”, afirma Metz. Los soldados regresarán, siete meses después, con las manos manchadas de sangre y marcados por la decepción.
Según Metz, “la película dibuja un retrato de las personas atrapadas entre los poderes enfrentados, que viven situaciones extremas”. Al realizador, siempre le ha gustado hacer películas acerca de personas que viven experiencias traumáticas, “en el contexto bélico y de los jóvenes que luchan, me interesaba descubrir qué percepción de la masculinidad, del bien, del mal, de la civilización y de la barbarie se reflejaba en la acción, y cómo estos conceptos se adaptaban a una historia iniciática” afirma Metz.
Draquila, L’Italia che trema
Per la sua parte, Draquila, L’Italia che trema (juego de palabras entre Drácula y L’Aquila) es el cuarto largometraje de Sabina Guzzanti una famosa cómica italiana, realizadora y popular autora satírica, que lleva su investigación excavando entre las ruinas del terremoto que devastó la ciudad de L’aquila, el 6 de abril de 2009.
Una ciudad devastada por un terremoto, es según Guzzanti , “el lugar perfecto desde el que describir la caída de Italia hacia el autoritarismo, los chantajes, los escándalos que han paralizado el país”. ¿Por qué los italianos votan a Berlusconi? L’Aquila, una magnífica ciudad destruida por un terremoto, nos dará la respuesta a esta pregunta.
La película muestra el trabajo propagandístico de Berlusconi y sus efectos en el pueblo italiano. Guzzanti habla de “por qué la oposición no reacciona, de su inconsistencia y falta de poder político; y de por qué los ciudadanos no consiguen organizarse”. Esta investigación refleja cómo se ignoran las leyes y se pisotean los derechos civiles.
La misión de Sabina Guzzanti, después de una larga carrera como guionista y actriz en programas televisivos de culto, es sacar a la luz oscuros acontecimientos políticos y económicos en la Italia contemporánea.
Como protesta contra la censura impuesta a su programa RaiOT, Sabina Guzzanti rodó su versión de la historia en un polémico documental titulado Viva Zapatero (2005) en el que condenaba la falta de libertad de expresión en Italia. Después del éxito de taquilla de la película, volvió a colocarse detrás de la cámara con la comedia Le ragioni dell’aragosta (Las razones de la langosta), con los cómicos de Avanzi, un programa de sátira política muy de moda en los noventa. Las películas de Guzzanti han sido una constante fuente de debate, y han conquistado al público.
El Festival de Sevilla tendrá como invitada, este año, a la cinematografía holandesa.
Armadillo
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=VPwTcHS5Bj0[/youtube]
Draquila, L’Italia che trema
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=dqzVglw_cBY[/youtube]
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