Nuage y Rivage PM llevan el mejor sonido a Studio 22 en Oestrich-Winkel

El estudio creado por Stephan Weber está a la vanguardia del sonido en vivo y grabado con los sistemas Yamaha Rivage PM5 y Nuage.

Situada a orillas del río Rin, la ciudad alemana de Oestrich-Winkel es quizás más conocida por estar en el corazón de la región vinícola de Rheingau y por su Festival de Música de Rheingau, que se celebra anualmente.

Pero en una tranquila calle residencial, el propietario e ingeniero de audio en Studio 22, Stephan Weber, está a la vanguardia del sonido en vivo y grabado con los sistemas Yamaha Rivage PM5 y Nuage.

Weber comenzó como un especialista en redes informáticas profesionales pero, como tantos otros que se gradúan en la industria del audio, era músico en su tiempo libre. Un pequeño estudio casero y la mezcla de bandas locales llevó a más trabajos de audio, incluyendo la mezcla de teatro musical y eventos en el complejo turístico Kurhaus, casino y un complejo de conferencias en Baden-Baden.

Una solicitud de la compañía de cruceros Hapag-Lloyd por sus habilidades en tecnología de la información llevó a que se le pidiera a Weber que le ayudara con sus conocimientos de tecnología del entretenimiento, lo que condujo a la creación de Studio 22. Desde entonces, su negocio principal ha sido la planificación, servicio e instalación de sistemas de tecnología de entretenimiento en cruceros de lujo. También ha desarrollado el sistema de servidor de streaming Digital Remote Entertainment And Media Solution (d.r.e.a.m.s) para la música de fondo, con clientes en todo el mundo.

Casado con la cantante Dunja Koppenhöfer, Stephan montó una sala de grabación multifuncional en su casa de Oestrich-Winkel. Añadiendo otras dos salas de audio dedicadas en 2019, ha continuado expandiendo los aspectos de mezcla en vivo y en estudio de su negocio.

“Necesitábamos espacio para que Dunia enseñara actuación y ensayo, así que grabar ‘en casa’ tenía sentido. También entrenamos a mis clientes aquí”, asegura. “¡Es importante que tenga acceso al audio por el bien de mi alma!”

Fiel a Yamaha

Stephan empezó a usar los mezcladores digitales de Yamaha al principio, con el ProMix 01 en 1995: “compré dos: uno para el trabajo en vivo y el otro para automatizar los módulos de sonido MIDI y otros equipos externos en el estudio”.

Desde entonces ha utilizado una gama de mezcladores digitales de Yamaha, señalando que “desde el lanzamiento de la serie CL, me ha gustado mucho la disponibilidad de diferentes tamaños de superficie de consola de Yamaha, dependiendo de lo que se necesite hacer. Otra cosa que me gusta es cómo el flujo de trabajo se ha mantenido básicamente igual. La tecnología no debería quitarte la concentración del rendimiento y, para mí, es muy útil que no importe el mezclador de Yamaha que tengas delante, puedes trabajar sin pensar. Junto con la estabilidad, la fiabilidad y el excelente soporte, por eso Yamaha ofrece las herramientas perfectas para mí”.

El trabajo de Stephan en directo y en estudio abarca desde la mezcla y grabación de orquestas, bandas, discursos y conferencias hasta la producción musical, mezclas de sonido envolvente, sincronización de películas y vídeos de formación corporativa. Para mantenerse al día, necesita seguir invirtiendo en la tecnología tanto en directo como en estudio.

En verano compró uno de los primeros sistemas de mezcla digital Rivage PM5 en Alemania.
“Tengo tres consolas de la serie CL, pero a veces llego al límite de los canales, auxes y buses matriciales del CL5, especialmente con los musicales y los proyectos crossover, que siempre tienen muchos requisitos diferentes y el equipo de backstage”, comenta.

“Invertir en el ecosistema de Rivage con la nueva superficie del CS5 fue la mejora perfecta para aumentar la capacidad y beneficiarse de los nuevos plug-ins de Rivage. El PM5 de Rivage me permite ser más flexible para todo tipo de eventos en vivo y, con las consolas de la serie CL, tengo la opción de utilizar el mejor sistema para satisfacer las necesidades del cliente”.

“Mientras tanto, en el estudio, ha estado usando Nuendo DAW de Steinberg desde que fue lanzado por primera vez en el 2000. Pero descubrió que los controladores de terceros siempre implicaban mucha configuración para conseguir algo utilizable y demasiado compromiso en su flujo de trabajo”.

“Después de probar otras marcas, no creí que alguna vez usaría un controlador con Nuendo. Eso fue hasta que tuve en mis manos una consola Yamaha Nuage. Inmediatamente quedó claro que era el primer controlador de Nuendo en el que valía la pena pensar”, añde.

“Tenerlo todo en una ‘caja de una marca’, incluyendo una interfaz sencilla que encaja perfectamente con el software, faders motorizados, interruptores de monitorización y más para el control durante la grabación, la automatización durante la mezcla y todas las cosas necesarias como la gestión y el control de los altavoces, talkback, panorámica surround y todo lo demás… es impresionante”reconoce Weber.

“Me gusta la banda táctil para el desplazamiento, el fácil acceso a los filtros, los ecualizadores, los canales auxiliares y las curvas de automatización de los canales para los efectos. Es tan simple que puedo ignorar la parte técnica de mi trabajo y trabajar verdaderamente ‘musicalmente’. Nuage ahorra mucho tiempo, permitiéndome responder a los clientes más rápidamente. Tanto el sistema de Rivage como el de Nuage son muy impresionantes. Y realmente creo que cualquiera que dé su sangre, sudor y lágrimas en el escenario o en el estudio merece que su producción o grabación utilice las mejores herramientas”, concluye Weber.

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