El nuevo Inmarsat-5 F2 da un nuevo paso hacia el acceso global a banda ancha de alta velocidad

El Inmarsat-5 F2 fue construido por Boeing con un presupuesto de 1.600 millones de dólares.

El pasado domingo un cohete ruso Proton Breeze M de International Launch Services (ILS) lanzó a las 12:31 GTM desde el Cosmódromo de Baikonur (Kazajistán) el nuevo satélite Inmarsat-5 F2 (I-5 F2).

Una vez el satélite complete la maniobras para ajuste de su órbita elíptica geosincrónica, haya desplegado sus paneles solares y reflectores y alcanzado su órbita geoestacionaria, previsto para finales de marzo, estará listo para ofrecer banda ancha móvil de alta velocidad en todo el mundo.

El Inmarsat-5 F2 fue construido por Boeing con un presupuesto de 1.600 millones de dólares. Con este nuevo lanzamiento la flota de satélites Global Xpress ofrecerá cobertura global uniforme de banda Ka.

El primer satélite Global Xpress (Inmarsat-5 F1) fue lanzado en diciembre de 2013 y entró en servicio comercial regional en julio de 2014, cubriendo Europa, Oriente Medio, África y Asia. Por su parte, el nuevo Inmarsat-5 F2, ofrecerá servicios de banda ancha súper rápida Global Xpress en América y el Océano Atlántico.

El CEO de Inmarsat, Rupert Pearce, reconoce que este lanzamiento “es un paso hacia delante significativo en nuestra jornada para ofrecer el primer servicio globalmente disponible de banda ancha móvil de alta velocidad del mundo. Nuestro primer satélite GX entró en servicio comercial en julio de 2014, y desde entonces ha brindado un servicio excelente a nuestros clientes en Europa, Oriente Medio, África y Asia. Con el Inmarsat-5 F3, que se espera sea lanzado por Proton en los próximos meses, estamos a tiempo de alcanzar una cobertura totalmente global en el inicio de la segunda mitad del 2015”.

El lanzamiento del tercer satélite Global Xpress, Inmarsat-5 F3, está programado para el inicio del segundo cuatrimestre de 2015, e Inmarsat planea iniciar servicios comerciales globales de GX en la segunda mitad del mismo año. La nueva red, que complementa la flota existente de satélites de comunicación banda L de Inmarsat, ofrecerá servicios de banda ancha móvil uniformes y súper rápidos en todo el mundo.

Pearce ha reconoce el éxito de los equipos de ingeniería de Inmarsat y de todos los profesionales involucrados en el diseño, desarrollo, manufactura, pruebas y lanzamiento, así como a sus socios en esta aventura, Boeing e ILS.

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