Óxido landet in Spanien und bringt seine 18-jährige Erfahrung in der LATAM-Postproduktion ein

Marco Rodríguez, fundador y CEO de Óxido, visitó Madrid para inaugurar la primera oficina de la compañía de postproducción en España, la cual cuenta con el liderazgo local de Raúl Lavado (‘Cuéntame cómo pasó’) e integra una sala de corrección de color conectada remotamente con el HUB de la compañía en México.

El desembarco de Óxido en España, compañía con 18 años de trayectoria en la industria audiovisual, se corresponde al deseo de explorar el hiperactivo mercado español y tender nuevos puentes entre México y el audiovisual europeo. Esta primera fase, con una oficina céntrica muy próxima a la estación de Atocha, será una toma de contacto que vendrá seguida de la creación de una “estructura propia en España” si se confirman las expectativas depositadas en esta iniciativa, tal y como afirmó Marco Rodríguez

Óxido, con un portfolio consolidado en Latinoamérica con películas y series tan destacadas como La casa de las flores, Roma, La hermandad Ö Cantinflas, ofrece servicios de postproducción visual, sonora, VFX, localización e intervención en set. Lo hace apoyándose con una miríada de soluciones tecnológicas como FilmLight, la herramienta Transkoder de Colorfront, Clipster de Rohde & Schwarz o el almacenamiento Nexis de Begeistert, pilares de un flujo de trabajo que no tiene miedo a la deslocalización de recursos potenciada por el periodo pandémico. “A raíz de la pandemia nos dimos cuenta de que el proceso de postproducción no requería de la presencia física de las personas en las salas, entonces diseñamos una interconectividad de las dos oficinas México-Madrid vía internet que nos permitirá ofrecer el servicio de Corrección de Color con una sala en España pero que se puede controlar desde México”, traslada Rodríguez.

De inicio, la infraestructura de Óxido en Madrid cuenta con una sala de corrección de color con Baselight bajo la licencia de Filmlight, convirtiendo así a la compañía en la única empresa iberoamericana en contar con seis equipos operando con este modelo, superando a las salas de postproducción de Fernsehen j Globo TV que trabajan con cinco cada una. Utilizando este sistema, los creativos de Óxido podrán trabajar conjuntamente en proyectos, si bien se espera que estas oficinas en la capital española posibiliten un “intercambio de residencia de nuestros coloristas para mezclar culturas y visiones a nivel color que nos enriquezcan en ambos sentidos”.

La inauguración de Óxido ha congregado a un importante número de técnicos, coloristas, productores y realizadores, en lo que ha sido un primer paso efectivo en pos de la esperada consolidación en un competitivo mercado, si bien lleno de oportunidades: “Esta expansión tiene tanto riesgos como ventajas, pero creemos que no tenemos nada que perder y sí mucho que ganar, porque siempre nos hemos caracterizado por estar en la vanguardia tecnológica para que nuestros clientes cuenten con los equipos de última generación para sus proyectos. Y ahora eso está disponible en la industria española, que esperamos que nos reciba muy bien”, concluye Rodríguez.

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