El Anuario SGAE toma el pulso al audiovisual
La crisis económica y al cambio de paradigma tecnológico, con la sustitución de soportes, la aparición de nuevas alternativas de ocio y el consumo de música y películas en Internet, marcan las tendencias en el audiovisual que la SGAE recoge en su anuario.
Según queda de manifiesto en el Anuario SGAE 2012 de las Artes Escénicas, Musicales y Audiovisuales el descenso en el volumen de negocio en el cine, el video o la música grabada, se deben, principalmente, a la confluencia de dos factores: la crisis económica y al cambio de paradigma tecnológico, con la sustitución de soportes, la aparición de nuevas alternativas de ocio y el consumo de música y películas en Internet, consumo en su mayor parte realizado infringiendo las leyes de propiedad intelectual.
Por otro lado, la radio y la televisión aparecen ahora como alternativas de ocio y de cultura refugio, y es en estos sectores en los que podemos encontrar un crecimiento del tiempo dedicado a su consumo. Sin embargo, desde un punto de vista económico, la crisis también está afectando negativamente a estos sectores a través de los graves descensos en inversión publicitaria.
Kino
El año 2011 supone, para la exhibición cinematográfica, la continuación de la tendencia negativa experimentada desde años anteriores que, si bien muestra descensos más leves que en otros sectores parece poner fin de manera decidida a la tendencia positiva experimentada desde comienzos de los años 90. En 2011 se perdieron 45 pantallas respecto al año anterior (un 1,1% menos), que quedaron en 4.028. Un 77,5% del total se distribuyeron en complejos de cine con más de cinco pantallas. Cataluña (19,8%), Madrid (13,6%) y la Comunidad Valenciana (11,3%) fueron las CC AA con mayor número de pantallas de cine. En cuanto a la introducción de pantallas de cine digitales, España está en la cuarta posición del ranking de los países europeos (con 1.545), por debajo de Francia, Reino Unido y Alemania.
El número de sesiones, siguiendo la tendencia anteriormente citada, se redujo ligeramente, según el Anuario SGAE, pasando de 4.581.803 millones en 2010 a 4.518.778 en 2011 (un 1,4% menos). Estas sesiones atrajeron a 98,2 millones de espectadores, lo que frente a los 101,1 millones de 2010 supone un descenso de 2,9 millones de espectadores en un año (pérdida del 2,8%). El total de espectadores se concentra principalmente en Madrid (20,9%), Cataluña (20,6%) y Andalucía (14,57%), sumando entre las tres comunidades más del 55% de la audiencia. En términos per cápita, la asistencia por habitante al año es de 2,1 películas con un gasto medio por entrada de 6,5 euros.
Tras el repunte producido en la recaudación en 2009, asociado a la introducción de la tecnología 3D y a los precios más elevados de las sesiones con esta tecnología, en 2010 volvió a descender un 2,5% respecto a 2009 y en 2011 se produjo un nuevo descenso, en este caso del 3,5% respecto al año anterior. En el año 2011 se alcanza una recaudación de 638.315.018 euros. Madrid (22,4%), Cataluña (21,3%) y Andalucía (13%) encabezan la lista por CC AA.
El número de largometrajes exhibidos en las salas españolas durante 2011 ha descendido ligeramente con respecto al año 2010 (un 1,5% menos). Un 38,8% del total fue de nacionalidad estadounidense y el 24,3%, española. El único elemento positivo en la exhibición cinematográfica se encuentra en el hecho de que la asistencia y recaudación al cine español mostraron incrementos respecto al año 2010: un 22,6% en el número de espectadores y un 26% en la recaudación, debido al estreno de de filmes españoles con un gran poder de convocatoria
El mercado videográfico español continúa el descenso iniciado entre los años 2004 y 2005. Todas las cifras han experimentado un retroceso en 2011.
La recaudación ha experimentado una caída del 35%, con unos resultados de 82 millones de euros. Si analizamos con más detalle este indicador observamos que la venta ha disminuido en mayor medida (un 38% menos) que el alquiler (9% menos). No obstante, el peso relativo de la venta es mucho mayor que el del alquiler, un 88% del total de la recaudación frente a un 12%.
En 2011 hubo 338 lanzamientos de alquiler y 2.333 de venta, lo que supone una pérdida respecto a 2010 de 31 títulos en alquiler y 783 en venta, con un descenso del 8% y 25%, respectivamente. Pero aún se ha acentuado más la caída en el número de unidades que ha sido en 2011 de 370.525 en alquiler y 9.463.758 frente a las 536.546 y las 13.452.088 del año anterior, respectivamente. Esto supone un descenso del 31% en alquiler y 30% en venta.
Pero si comparamos las cifras de 2011 con las del 2005 (fecha en la que se ha iniciado el retroceso en el sector del video) podemos hablar de pérdidas de hasta el 89% en alquiler y del 64% en venta. Estos datos nos demuestran el retroceso que ha experimentado el mercado videográfico en España.
En este contexto habría que nombrar las prácticas fraudulentas respecto a la ley de propiedad intelectual relativas al consumo de películas tanto offline en un principio, como online según iba aumentando el ancho de banda. Para el 2010 se descargaron un total de 604 millones de archivos de películas, de los cuales 576 millones fueron descargas gratuitas. Sin embargo, para el 2011 hubo una reducción de las descargas (104 millones menos que en 2010) con un total de 500 millones, de los cuales 476,3 fueron gratuitas. Así mismo se observa una leve reducción de descargas con pago previo, ya que en el 2010 observamos 19,6 millones y en el 2011 hubo 19,5 millones.
Fernsehen
El sector de la televisión, tras las fusiones llevadas a cabo en los últimos años y realizada la transición a la TDT se encuentra en un momento muy delicado, ya que el consumo de televisión se ve afectado por otras ofertas de ocio y por la multiplicidad de ventanas que el espectador tiene a su disposición actualmente. Por otro lado, la crisis económica convierte a la televisión en una alternativa de ocio más accesible a distintas capas sociales, por lo que no resulta sorprendente encontrar un incremento del consumo televisivo en estos años. Así, aunque la audiencia esté fragmentada y sea más difícil acceder de golpe a muchos espectadores (con pocos canales de televisión), el dato de consumo medio diario muestra una tendencia de aumento en la demanda de televisión que, si bien ya se venía produciendo desde el año 2001 -salvo un pequeño retroceso de 2008 a 2009- se ve mucho más acentuado en los años marcados por la crisis económica. En 2011 las cifras han aumentado, logrando entre semana 236 minutos diarios y, durante el fin de semana, que abarca los días de mayor consumo televisivo, pasó a 247 minutos/persona. La cifra promedio de este nuevo año pasa a ser la más alta de los últimos 19 años: 239 minutos de media por persona y día.
Sin embargo, y pese al crecimiento en el consumo televisivo, en 2011 el descenso de la inversión publicitaria continuó. El año cerró con una cifra de inversión final de 2.237,2 millones de euros (234,7 millones menos respecto a 2010). Este declive (del 9,5% respecto a 2010) fue consecuencia directa de los efectos de la crisis económica y de los recortes en inversiones publicitarias por parte de los anunciantes.
Entre los 10 programas con mayor audiencia en 2011, encontramos que el más visto corresponde al encuentro Barcelona-Real Madrid del 3 de mayo. En general, entre los 10 primeros encontramos las retransmisiones futbolísticas (partidos de la Liga española y de la Eurocopa) y la serie de TVE Águila Roja, que ocupa el puesto número 9. Entre los 20 más vistos, se suman las campanadas de fin de año y las votaciones de Eurovisión, programas de la cadena pública.
La lista de las 10 películas más vistas y emitidas por televisión la encabezan El intercambio e Iron Man.
El modelo de radiodifusión español está compuesto por diferentes grupos privados y emisoras de ámbito nacional. La mayoría de las emisoras más relevantes pertenecen a grupos de comunicación nacionales. En esta línea encontramos que Cadena Ser tiene 216 emisoras, RTVE, 182, Onda Cero, 161 y Cadena COPE, 144.
En lo que se refiere a su audiencia, y según la información elaborada sobre los datos del EGM, hay que decir que varía poco a poco de año en año y que está en torno al 58,5% de cobertura, si bien, muestra ligeros incrementos. Así, si en 2010 un 56,9% de los españoles mayores de 14 años escuchaba alguna vez la radio, en 2011 ese porcentaje asciende al 58,5%. El tiempo de escucha por habitante ha aumentado en tres minutos: de 107 minutos diarios en 2010 se ha pasado a 110 en 2011. La Rioja (con 144 minutos diarios de escucha de lunes a viernes) encabeza la lista por CC AA, seguida de Aragón (con 140) y Cantabria y Castilla y León (ambas comunidades con 139).
En relación a las franjas horarias con más audiencia, éstas siguen siendo las mañanas de los días laborables (con un 73%) y las mañanas de los sábados (58,7%) y domingos (53,4%). Entre los oyentes de radio predominan las siguientes características del perfil: hombre, de entre 35 y 44 años, casado y con un nivel de estudios secundarios o de Formación Profesional y residente en zonas de entre 10.001 y 50.000 habitantes.
Respecto a la inversión que el mercado de la publicidad realiza en la radio, hay que decir que: a pesar de tratarse del segundo medio con mayor audiencia en España, a pesar de tener una audiencia en crecimiento, a pesar de que ofrece buenas oportunidades para la segmentación de targets y contenidos, a pesar de su capacidad de consumo ubicuo y de la gran lealtad que generan muchas de sus figuras y locutores (y su enorme capacidad de prescripción), la radio, durante 2011, generó por ingresos publicitarios un 4,4% menos que los ingresos obtenidos por publicidad en 2010 (525 millones de euros).
Por último, reseñar que el mercado de los videojuegos también ha experimentado un fuerte retroceso en estos años. Si bien este era un sector en constante crecimiento a lo largo de los últimos años noventa y de los primeros de la década inicial del siglo XXI, vemos que desde el año 2008 el valor de las ventas asociadas al mercado de videojuegos disminuye un total del 32,6%.
Hat Ihnen dieser Artikel gefallen?
Abonnieren Sie unsere RSS-Feed und Sie werden nichts verpassen.