‘Guardians’, la apasionante series documental sobre la caza furtiva, captada con cámaras Blackmagic

Conservation Film Company produjo con cámaras de Blackmagic Design para EarthXTV, ‘Guardians’, la serie documental de siete episodios que profundiza en el valiente trabajo de los guardaparques contra la caza furtiva en el delta del río Zambezi (Mozambique).

Gracias a una cinematografía extraordinaria y una narración íntima, esta serie documental de siete episodios de 23 minutos ofrece una mirada única ante las luchas y los triunfos diarios de estas personas dedicadas.

Sean Viljoen, director de la serie y camarógrafo, afirma que «Guardians es una serie basada en hechos reales que va más allá de los titulares, a fin de mostrar al público los esfuerzos necesarios para salvaguardar la fauna en África, a través de la mirada de la gente local al frente de esta lucha. Queríamos contar su historia de la manera más cinematográfica posible».

Durante la reciente guerra civil en el país, la vida silvestre del lugar en todas las especies, incluidos los mamíferos grandes, se redujo un 90 %. A partir de ese momento, se la protegió y se logró recuperar, pero a medida que la población humana fue creciendo, la caza furtiva por subsistencia empezó a aparecer nuevamente, así como la destinada a los mercados de carne de animales silvestres.

Conservation Film Company pasó siete semanas filmando junto a 19 guardaparques empleados para proteger los extensos 2000 kilómetros cuadrados de la concesión para safaris Coutada 11, en Mozambique. Con recursos limitados en el campo, el equipo de producción necesitó herramientas versátiles para capturar material de calidad alta y, al mismo tiempo, minimizar las complejidades logísticas.

Para la producción de la serie se emplearon una amplia cantidad de cámaras cinematográficas digitales, incluidos los modelos URSA Mini Pro 12K, URSA Mini Pro 12K OLPF, URSA Mini Pro 4.6K G2 y Pocket Cinema Camera 6K Pro, todas ellas de Blackmagic Design .

«Creamos la mayor parte de los contenidos cámara en mano. Con frecuencia nos subíamos a motocicletas con el equipo anti-caza furtiva, así que eso limitó muchísimo la cantidad de equipos que podíamos llevar, teniendo en cuenta los distintos tipos de contenidos que queríamos cubrir. Todas las cámaras contaban con los mínimos accesorios para lograr un sistema de captura sobre la marcha», observa Viljoen.

Una cámara para cada fin

Para la mayor parte de los contenidos con diálogo, confiaron en varias cámaras URSA Mini Pro 12K, mientras que usamos el modelo Pocket Cinema Camera 6K Pro como una tercera unidad, con un objetivo de mayor alcance, por ejemplo, uno Canon 70-200mm f2.8 o uno Canon 200-400mm f4. Por otro lado, se equipó la URSA Mini Pro 12K OLPF con un objetivo Fujinon XK20-120mm T3.5 y la URSA Mini Pro 12K principalmente con objetivos cinematográficos de distancia focal variables DZO.

Asimismo, el equipo de producción usó una unidad Pocket Cinema Camera 6K Pro con un estabilizador Ronin S3 Pro, un objetivo Sigma 18-35mm f1.8, a fin de grabar en espacios reducidos, por ejemplo, dentro de vehículos en movimiento que iban junto al equipo anti-caza furtiva. Por otro lado, para las tomas aéreas, se empleó un dron DJI Mavic 3.

Viljoen comentó que se sorprendió con la calidad de imagen. «Estoy muy feliz con el rendimiento del modelo 12K, si se consideran las condiciones en las que grabamos. Gran parte de la historia ocurre en exteriores con luz natural; sin embargo, la manera en la que el modelo 12K procesa las zonas claras es particularmente excepcional. Además, el códec Blackmagic RAW ofrece una amplia latitud con la que se puede trabajar».

Rodar en una zona remota fue bastante difícil para el equipamiento de cámara que debió responder en condiciones extremas. Las temperaturas durante el día suelen rondar los 40 grados centígrados, con una humedad altísima. «Una vez que empieza a salir el sol a la mañana, se crea mucha condensación en los objetivos, algo muy desafiante. En esta producción, contábamos con varias cámaras de respaldo, pero no necesitamos usar ninguna al final».

El montaje

Además de Viljoen, el equipo contó con la colaboración del director de fotografía Garth de Bruno Austin, el camarógrafo Keenan Ferguson y el editor Joe Krenzer, que también trabajó como técnico en imágenes digitales.

«Debido a que estábamos rodando el episodio piloto al mismo tiempo que el resto, fue muy útil tener a Joe durante el rodaje. Realizaba el montaje de la primera entrega y destacaba lo que nos faltaba y los que nos ayudaba a darle forma al programa», explica Viljoen.

Krenzer montó una estación de edición en una carpa, donde descargaba el material de las tarjetas en dos unidades de almacenamiento de 32 TB, a fin de crear archivos proxy durante la noche, listos para editar al día siguiente en DaVinci Resolve Studio, el programa de edición, etalonaje, efectos visuales digitales y posproducción de audio. Durante toda la serie, se grabaron un total de 25 TB de material.

«Llevamos a cabo toda la posproducción en DaVinci Resolve, incluida la edición, el etalonaje y la masterización», comenta Viljoen. «He notado muchísimos beneficios en esto. Ya sea una producción con más presupuesto y un equipo numeroso en nuestras instalaciones en Ciudad del Cabo o solo yo yendo a todos lados con mi portátil, es posible usar una única plataforma. Es muy eficiente en ese sentido».

De Bruno Austin aplicó tablas de conversión (LUT) en dos unidades URSA Mini Pro 12K, la cuales se volvieron la estética base para toda la serie y se usaron a fin de ayudar a unificar las imágenes y la exposición del material proveniente de otras cámaras.

«Hay que lograr una exposición correcta en el modelo 12K con un valor ISO de 3200; sabíamos que lo que se veía bien en un monitor brillante con poca luz nos podía desorientar, de modo que la LUT que Garth creó permitió compensar eso», subraya Viljoen.

Rodaron en formato 8K con una compresión 12:1, a fin de entregar material en UHD 4K. Esa proporción permitió lograr un buen balance entre el tamaño de los archivos y su almacenamiento en el set.

Viljoen añade que «queríamos aprovechar al máximo la calidad de imagen y el hecho de poder reducir la resolución al grabar en 8K. Quedamos muy contentos con el material y la cantidad de información con la que trabajamos».

Proyecciones para la comunidad

Suele suceder en algunas producciones que un programa se transmite al mundo, pero la gente que estuvo involucrada no llega a verlo jamás. Conservation Film Company organizó una proyección especial de los episodios para que los guardaparques y sus familias pudieran verlos en un centro comunitario.

«Era muy importante devolverle a la comunidad lo que habían hecho y compartir lo que habíamos grabado, dado que más allá de los guardaparques, pocas personas entienden todo lo que hacen para rastrear, vigilar y arrestar a los cazadores furtivos. Ojalá que hayamos hecho justicia por el trabajo destacable que realizan estos guardaparques en contra de la caza ilegal y haya llegado al público en todo el mundo y que inspire a seguir actuando y generando conciencia acerca de la conservación de la fauna», finaliza Sean Viljoen.

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