La Velada del Año IV hace historia con un despliegue extraordinario de Riedel

Jaume Bordoy, gerente de Tilt, desgrana la amplia red de intercomunicaciones para la Velada del Año IV, cita impulsada por Goatch Global e Ibai Llanos que consiguió unas audiencias históricas apoyándose en tecnología de vanguardia como las soluciones Bolero y Artist de Riedel.

El pasado 13 de julio, el estadio Santiago Bernabéu de Madrid vivió una cita histórica que unió tradición y modernidad. Impulsado por el streamer Ibai Llanos, la cuarta edición de la Velada del Año, cita de boxeo anual que enfrenta a diversas personalidades del mundo de internet, superó con más de 80.000 localidades vendidas el récord de asistencia a un combate en España, establecido en 1930 por Paulino Uzcudun y Primo Carnera en el Estadio Olímpico de Montjuïc en Barcelona

La barrera superada en el terreno de la presencialidad se extiende al ámbito digital. La cita, retransmitida para el público hispanohablante a través del canal de Twitch de Ibai, logró conectar a más de 3,8 millones de dispositivos únicos (con 14,8 millones de espectadores y un total de 95 millones de views en directo) en lo que supuso un nuevo récord mundial en la plataforma de streaming estadounidense propiedad de Amazon. Decenas de parámetros más, que abarcan desde la concurrencia hasta las interacciones digitales, certifican el carácter histórico de una cita que, en su edición de 2025, volverá a tratar de superarse a sí misma.

Desde el punto de vista de la producción, la Velada del Año IV supuso el que posiblemente haya sido el evento con carácter broadcast más exigente del renovado Santiago Bernabéu. Las retransmisiones de un encuentro de primer nivel de LaLiga o la Champions League siempre requieren de un importantísimo despliegue técnico, si bien la producción dibujada por Goatch Global abarcó un total de 8 horas de retransmisión, seis combates con características únicas y siete actuaciones de músicos en directo de la talla de Will Smith, Bizarrap, Anuel AA o David Bisbal.

Pol Forès, socio de Far productions, responsable de la producción técnica de la velada del año, no tuvo ninguna duda en encomendarle este trabajo a Jaume Bordoy, con quien ya han trabajado en muchas ocasiones previas y con quien siempre han encontrado las soluciones necesarias.

El equipo de Tilt apostó por el que posiblemente haya sido el mayor despliegue de una red de intercomunicación de Riedel en España, exceptuando las dispuestas en grandes centros de producción de televisión.

Una producción de estas características requirió de una extensa preparación in situ de más de una semana, además de meses de preproducción. Más allá de las 34 cámaras desplegadas por el escenario, o de coordinar la correspondiente retransmisión a través de Twitch, era fundamental contar con un sistema de intercomunicación que diera soporte a más de 150 usuarios, ya estuvieran en diversas ubicaciones del Santiago Bernabéu o a bordo de las distintas áreas de producción. Para hacer realidad este proyecto, el equipo de Tilt apostó por el que posiblemente haya sido el mayor despliegue de una red de intercomunicación de Riedel en España, exceptuando las dispuestas en grandes centros de producción de televisión. Bordoy muestra a Panorama Audiovisual todas las claves de su despliegue de intercomunicación en los prolegómenos de la Velada del Año IV desde la sala de control del Santiago Bernabéu.

Más de 200 soluciones Riedel, en La Velada del Año IV

“No podría hacer un evento de este tipo sin este equipo”, afirma Bordoy al ser cuestionado sobre la elección de equipos Riedel para la intercomunicación de La Velada del Año IV. Tilt ha sido fiel usuario de la marca germana desde que desembarcó en España, y le ha acompañado en todo tipo de producciones: “Tuvimos el primer sistema MediorNet TDM en una unidad móvil en España, y de los primeros sistemas de Intercom y Bolero… Contamos con un conocimiento absoluto de la marca y cuando nos propusieron llevar las comunicaciones de este evento, sabía que necesitaríamos un sistema que aportara máxima seguridad en las comunicaciones”.

Concretamente, el equipo de Tilt ha utilizado para la Velada del Año IV con 89 beltpacks Bolero; 62 interfaces de usuario SmartPanels; el sistema Artist 1024, funcionando vía IP y AES67 para gestionar todas las señales; un Artist 64, utilizado como conversor entre señales de audio analógico, MADI y Dante, y 26 antenas; todo, para establecer 12 IFBs, algunos de ellos estéreo, y 28 grupos de conversación, cifras a las que hay que sumar las 32 líneas de partyline adicionales establecidas con el sistema de intercomunicación propio de las unidades móviles de Mediapro, desde las cuales se mezcló gran parte de la producción de la cita. Este vehículo, que no contaba inicialmente en su construcción soluciones de Riedel, fue adaptado por el equipo de Tilt con la integración de varios SmartPanels y el establecimiento de 24 canales de comunicación de ida y de vuelta.

Para acometer el proyecto, Tilt se encontró con una ventaja añadida: la infraestructura propia tecnológica del Santiago Bernabéu disponía de un extenso despliegue de soluciones de Riedel, usadas habitualmente para la coordinación de su actividad habitual. “El equipo del Bernabéu nos ha dado todas las posibilidades. Hemos aprovechado sus paneles para llevar la comunicación a todo tipo de puestos y sus antenas para asegurar la cobertura por todo el estadio. Además, el sistema de audio sobre red que tiene el estadio nos ha facilitado muchísimo la instalación”, comenta Bordoy. De esta forma, a los 50 SmartPanels empleados de los 66 disponibles en el estadio, Tilt sumó 12 sistemas adicionales en ubicaciones clave.

“El equipo del Bernabéu nos ha dado todas las posibilidades. Hemos aprovechado sus paneles para llevar la comunicación a todo tipo de puestos y sus antenas para asegurar la cobertura por todo el estadio”.

La ya de por sí completa selección de equipos Riedel del Santiago Bernabéu precisó refuerzos en áreas clave. Un ejemplo es el despliegue de antenas que dan soporte a las intercomunicaciones de Bolero. En palabras del equipo de Tilt: “El estadio cuenta con antenas dispuestas por todo el recinto, pero no suficientes para tal densidad de beltpacks dentro del propio terreno de juego, dado que habitualmente no es necesario. Por ello, desplegamos 9 antenas adicionales para dar servicio a estas áreas de modo que FOH, regidores u operadores de cámara pudieran recibir las comunicaciones con las mayores garantías”.

Éxito total y máxima exigencia

Planificada durante cerca de un año desde la perspectiva creativa y técnica, La Velada del Año IV certificó su éxito monopolizando la conversación en canales digitales y ocupando posiciones en los principales informativos y medios de comunicación. Su llegada a buen puerto no es fruto de la casualidad, sino de horas de conversaciones, talento humano y soluciones tecnológicas robustas y fiables. En palabras del propio Bordoy: “Ha sido complejo, pero el sistema de Riedel, su tipo de arquitectura y su software han hecho que todo el trabajo sea absolutamente fácil. Que podamos trabajar offline antes de venir aquí ha agilizado todos los procesos y nos ha permitido contar con una red de comunicaciones potentísima”.

“Bolero como potencia de comunicaciones, petacas y coberturas; la conectividad de la matriz de Riedel, que marca una brutal diferencia con cualquier otro sistema… Por mucho que me lo dijesen, no abordaría este trabajo con ningún otro sistema”.

La planificación no está exenta de los habituales imprevistos del mismo día del evento. Nunca es sencillo coordinar los cientos de puntos de cruce de intercomunicación en un despliegue de tamañas dimensiones, pero mediante el uso del software de Riedel, Director, Bordoy y su equipo interactúan en tiempo real el sistema para adaptarlo a la preferencia de cada usuario. En otra ocasión, tres operarios situados en el corazón del escenario manifiestan que sus intercom se encuentran “fuera de red”, si bien las antenas de Riedel son capaces de redistribuir y manejar las señales para que todos los usuarios estén conectados. Un error humano: la antena había sido desconectada manualmente y, en cuestión de minutos, ya estaba operativa. “Siempre pueden suceder cosas así a minutos de empezar, pero con Riedel lo podemos solucionar al momento. No me puedo imaginar cómo sería esto con otro tipo de software”, comenta Bordoy mientras modifica unos parámetros rápidamente en su ordenador portátil.

Una vez que comienza el espectáculo, todo se desarrolla a la perfección. La intercomunicación se sucede para que, hora tras hora, se desarrollen combates, actuaciones musicales, sorpresas y comentarios en tiempo real conformando una cita irrepetible. Bordoy, una vez más, se reafirma en su decisión de elegir Riedel: “Bolero como potencia de comunicaciones, petacas y coberturas; la conectividad de la matriz de Riedel, que marca una brutal diferencia con cualquier otro sistema… Por mucho que me lo dijesen, no abordaría este trabajo con ningún otro sistema”.

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