Dell entra en almacenamiento masivo con la compra de EMC

Con esta operación, la mayor adquisición en la historia del sector de tecnología, Dell irrumpe en el rentable negocio del almacenamiento de datos gracias a una operación valorada en 67.000 millones de dólares.

Hace dos años, Michael Dell decidía, levantando gran sorpresa en el mercado, retirar la compañía que lleva su apellido de la Bolsa.

La compra apalancada por 24.000 millones de dólares de Dell en 2013 permitió a su fundador maniobrar fuera de la presión del público y revitalizar el negocio principal de la compañía. Las participaciones de Dell, su vehículo de inversión y la firma de capital privado Silver Lake han duplicado su valor en unos 11.000 millones desde entonces.

Comenzaba así una reestructuración profunda de la que ahora empezamos a ver los primeros frutos al anunciar la compra de EMC.

La operación valorada en 67.000 millones de dólares significará la irrupción de Dell en el rentable negocio del almacenamiento de datos.

EMC aportará a Dell una amplia gama de soluciones de almacenamiento de datos con la que el fabricante estadounidense pretende reforzar su presencia en el área de servidores, almacenamiento y redes compartidas. Y es la caída en ventas de PCs y el desarrollo de la computación en nube han dado en la línea de flotación del negocio histórico de Dell.

Esta compra permitirá a Dell explotar un esquema desarrollado por EMC, conocido como de infraestructura convergente, para vender PCs, almacenamiento y equipos de red como un paquete de fácil instalación.

Dell valora EMC en 33,15 dólares por acción. Los inversores de la compañía recibirán 24,05 dólares en efectivo por cada título y una compensación adicional por el valor de la filial VMware, controlada en un 80% por EMC y que se mantendrá como empresa cotizada de forma independiente.

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