‘Gran Hermano’ encuentra en Panasonic la respuesta tecnológica para «el ojo que todo lo ve»

Han transcurrido doce años desde la primera edición de Gran Hermano. A lo largo de este tipo, su productora en España, Zeppelin Tv se ha convertido en una referencia en la producción de realities desarrollando una interesante tecnología propietaria de control IP, gestión de metadatos y catalogación. La tecnología de Panasonic, con sus mini-cámaras multipropósito AW-HE100 y AW-HE50, juegan un papel fundamental como el ojo que todo lo ve en este experimento sociológico televisivo.

Si hay un formato incombustible en televisión es Gran Hermano. Alabado y denostado a partes iguales, pero con un imperecedero respaldo por parte de la audiencia en unos 70 países, Big Brother nació en septiembre de 1997, durante una sesión de brainstorming en la productora John de Mol Produkties (Endemol) en la que participaron John de Mol, Patrick Scholtze, y los hermanos Bart y Paul Römer.

El nombre del programa hace referencia a la novela que George Orwell publicó en 1949, Mil novecientos ochenta y cuatro, en la que el Gran Hermano puede verlo todo las 24 horas del día. Partiendo de esta novela así como de la experiencia Biosfera 2, que en 1991 aisló a un grupo de personas en el desierto de Arizona, y del formato sueco Expedition Robinson (posteriormente popularizado como Supervivientes), la productora Endemol inauguraba la era dorada del reality show en mayúsculas.

El 16 de septiembre de 1999 se emitía por vez primera Big Brother en los Países Bajos poniendo, bajo la atenta y continua mirada de las cámaras, a un grupo de concursantes que tienen que convivir sin contacto alguno con el exterior durante unos tres meses.

Además de la misma convivencia, que es el eje principal y mayor atracción del concurso, el reality gira en torno a 4 bases: la vuelta a lo básico en su rutina diaria, el sistema de eliminaciones, la pruebas semanales propuestas por Gran hermano y el confesionario, donde, individualmente, los concursantes expresan sus pensamientos, sentimientos, frustraciones y sus nominados.

A lo largo de estos catorce años, Gran Hermano ha vivido un éxito sin precedentes en televisión que sigue igual de vivo, gracias a las continuas variantes que edición tras edición se introducen, asegurando así entretenimiento a grandes masas.

Gran Hermano aterriza en España

La versión española de Gran Hermano comenzó el 23 de abril de 2000, apenas siete meses después de su despegue en Holanda, de manos de la productora Zeppelin Tv (posteriormente integrada en el propio grupo Endemol impulsora del formato). En una apuesta arriesgada debido a la polémica que el formato había levantado entre críticos, antropólogos, sociólogos, filósofos… Telecinco abre las puertas de su primer Gran Hermano el 23 de abril de 2000. Y, más allá de las suspicacias que levanta el formato, Mediaset España viene demostrando edición tras edición que observar a otros en su cotidianeidad despierta un interés y un magnetismo inusitado, del cual nadie queda afuera.

Desde entonces se han emitido un total de trece ediciones (la actual, denominada por aquello de la superstición GH 12+1, comenzó a mediados de enero), además de dos ediciones VIP (con personajes famosos) y dos «re-encuentros» (con ex-concursantes de ediciones anteriores coincidiendo con los diez años del programa).

Todo un reto tecnológico

La primera casa de Gran Hermano en España, instalada inicialmente en la localidad madrileña de Soto del Real, supuso un reto tecnológico único que revolucionaría la forma de producir realities.

Unos de los retos fue la gestión multicámara en un programa en directo con un importante número de posiciones se convertía en un verdadero quebradero de cabeza. Inicialmente, Endemol Holanda contaba con sistemas Sony con cámaras multifunción, así como con un workflow basado en magnetoscopios y cintas, junto a un software desarrollado por la propia multinacional japonesa con una descripción muy somera del material que se iba recogiendo. Este flujo de trabajo suponía numerosos cuellos de botella en pre-producción, selección y catalogación de material, y edición… que dificultaban la inmediatez que un formato 24 horas precisaba.

Ante esta situación, Juan Luis Romero, al frente de la dirección técnica en Zeppelin Tv, plantea un cambio tecnológico radical. Para GH 1, Zeppelin Tv apuesta por la tecnología de Panasonic con sus cámaras AW-E600 (de 1/2 pulgada) y los posicionadores AW-PH300. El aquellos tiempos la solución de Panasonic con cámaras pan/tilt, estaba pensada para controles cinco o seis unidades y no para decenas de cámaras que el programa en directo necesitaba.

El equipo de ingeniería de Zeppelin y Panasonic se puso manos a la obra desarrollando, junto a Crosspoint, un sistema compuesto por unas cajas intermedias donde se guardaban los parámetros de cada cámara, por lo que con un único joystick se podían remotear varios posicionadores, switcheando a la par las señales procedentes de las cámaras. Nacía así, sin que los ingenieros de Zeppelin fueran realmente muy conscientes del paso transcendental que en tecnología broadcast estaban dando, el nuevo entorno IP tan extendido hoy en día.

Juan Luis Romero comenta que «cuando se dispone de un único mando para cada cámara y hay que hacer ajustes individuales en cada una de ellas, el día a día de un programa 24/7 se hacía imposible. El sistema de memorización de parámetros de cámara que implantamos ya desde la primera edición de Gran Hermano nos permitió conservar los últimos parámetros de cada cámara ejerciendo así un control total sobre funciones clave como el iris. Efectivamente, fuimos pioneros en el desarrollo del IP en este entorno para controlar, direccionar y memorizar parámetros. Posteriormente, suprimimos el mando individualizado de CCU para ajustes, y desarrollamos una interfaz por software capaz de actuar y memorizar todos los parámetros de cámara (pan/tilt, color, iris…) desde un solo PC».

Pero la revolución tecnológica que supuso Gran Hermano en España no acabó ahí. Zeppelin optó por prescindir de la cinta e implementar un workflow basado en ficheros con un sistema de catalogación muy rápido que, junto al almacenamiento en PC, permitía el acceso a cualquier secuencia en cualquier momento.

Ya que las imágenes procedentes de la casa de Gran Hermano, que a partir de la segunda edición se muda a Guadalix de la Sierra (Madrid), se emplean en numerosos espacios de Telecinco, resultaba primordial que los diferentes guionistas pudieran acceder a cualquier plano, clip o secuencia de forma inmediata y catalogada.

«Sin duda alguna, todos estos desarrollos propietarios, más allá de la ingente cantidad de robóticas implementadas, ha distinguido a Zeppelin como especialista en realities», asegura Romero.

La tecnología Panasonic: los ojos de Gran Hermano

A lo largo de estos doce años de emisión de Gran Hermano, Panasonic ha ido renovando los modelos tanto de cámara como de posicionador. El siguiente modelo de cámara empleada en la producción del reality fue la AW-E650, cuya principal ventaja es que trabajaba ya a 12bits (en lugar de 10bits). Por su parte, el posicionador de interiores ha tenido varios modelos: al AW-PH300 inicial le siguieron el AW-PH350 y el AW-PH360.

Zeppelin ha acabado implementando paulatinamente todos estos modelos, ya que se han ido sucediendo a lo largo del tiempo las compras de material.

La actual edición de Gran Hermano cuenta con los modelos de cámaras multipropósito AW-HE100 y AW-HE50. La AW-HE100 destaca por ser un equipo compacto que cuenta con tres sensores CCD de 1/3» con captura a 1080/50i, 720/50P y 576/50i,25P y dispone de una óptica de 4.6-82.8mm. Con un peso de apenas 11 kilos y unas medidas de 50x30x30cm, ofrece salida de vídeo HD-SDI, SDI y compuesto. La AW-HE50 es una cámara IP que presenta características similares a su «hermana mayor», en cuanto a formatos de captura, pero en este caso con un sensor MOS de 1/3»; salida HD-SDI y SDI; y óptica 4.7-84.6mm.

En total, Zeppelin en Gran Hermano 12+1 está empleando un total de 40 unidades HE100 a las que habría que sumar varias HE50. Además, la casa cuenta con una decena de cámaras de infrarrojos (típicas en videovigilancia), así como varias cámaras fijas en zonas con poco paso y seis cámaras de estudio alojadas dentro de la denominada «cruz de cámaras» en el centro de la vivienda separadas mediante un cristal espejado.

Como resalta Juan Luis Romero, «optamos por Panasonic porque la fiabilidad del equipamiento debe ser total ya que al ser una emisión 24/7 durante tres meses, no podemos permitirnos el lujo de entrar para ajustar cámaras, por ejemplo. En casos muy excepcionales, hay que esperar a que estén dormidos o llevar a los concursantes a una sala con alguna excusa para que podamos intervenir…».

En caso de que por alguna incidencia a lo largo de los tres meses del concurso hubiera que sustituir una cámara, Zeppelin ha desarrollado también un curioso sistema de fijaciones basadas en una placa con tornillos de muelles sin fin que permitiría sustituir cualquier cámara y nivelar la nueva en cuestión de segundos.

Romero sostiene que «las cámaras de Panasonic al contar con pan/tilt y lente integrados en un equipo compacto supone todo ventajas. Si cada pieza y cableado va por separado, las averías y problemas tienden a multiplicarse, pudiendo surgir un problema en cualquier elemento. Son de por sí elementos susceptibles de tener algún problema. Sin embargo, en las Panasonic, al trabajar con un equipo compacto, la puesta en marcha es diez veces más sencilla por no hablar de su mantenimiento prácticamente nulo».

Destacar, por otra parte, que desde el punto de vista de la realización, las Panasonic AW-HE100 y AW-HE50 ofrecen un ángulo de casi 360 grados sin ángulo muerto ya que ambas basculan completamente en tilt y rotan en pan dejando la casa, sin secretos, a la vista del espectador.

Por lo que a respuesta de luz se refiere, según Romero, «estas cámaras presentan una respuesta francamente perfecta. Comparadas con las cámaras de estudio que están en la cruz de cámaras, que al estar detrás de un espejo ya pierden 2 puntos de diafragma, estas cámaras de Panasonic van sobradas. De hecho, el iluminador se quedó sorprendido ante la magnífica respuesta de las caámaras Panasonic en bajas condiciones de luz».

Workflow

Todas las señales SD procedentes de la totalidad de cámaras se enrutan a una matriz desde donde se conmutan directamente desde una botonera para seleccionar cuatro señales simultáneas cuya realización se lleva a los servidores Nexio de Harris. Estos servidores graban en loop (borrando material cada 24 horas). Mientras se graban estas cuatro señales, se hace una conversión de archivos (mediante un software de catalogación del material desarrollado por Zeppelin) sacando los clips a una SAN de 90TB y de ahí a postproducción para la preparación de resúmenes u otro material para diferentes programas.

Cuando el guionista evalúa el material en su propio PC, marca como útil las piezas y un sistema propietario hace una conversión a archivos .avi poniéndolos a disposición para postproducción.

Todas las señales de las cámaras están continuamente presentes en realización. Los redactores tienen sus propios conmutadores para pinchar determinadas cámaras, seleccionando los operadores a «golpe de botón» los cuatro programas a grabar. Para facilitar esta tarea, Crosspoint desarrolló para Zeppelin unos preselectores programables que permiten asignar áreas. De esta forma, si se selecciona, por ejemplo, «Cocina» inmediatamente se llaman todas las señales de audio y vídeo se esa zona facilitado así el trabajo de realización con tan ingente cantidad de cámaras.

Como conclusión, Juan Luis Romero afirma tajante que «sin duda, Gran Hermano ha sido el reto más importante al que nos hemos enfrentado por la responsabilidad que conlleva. Televisión en directo es mucha responsabilidad, pero llevar adelante un programa que se emite en directo 24/7 durante tantos meses es un reto enorme en el día a día. Los sistemas desarrollados en Zeppelin especialmente para Gran Hermano junto a la tecnología en cámaras multipropósito de Panasonic, en una implementación con gran éxito en España, se han puesto en marcha a lo largo de estos años en numerosas ediciones del programa en Polonia, Italia y gran parte de América Latina, por citar algunos ejemplos. Y es que no hay programa de televisión, desde el punto de vista técnico, comparable a Gran Hermano.

Multiplataforma

Además de la tecnología aportada a la producción del programa, la edición española de Gran Hermano supuso un antes y un después en el concepto de transversalidad de los contenidos en la parrilla y distribución multiplataforma. Desde su nacimiento, Gran Hermano ha aunado televisión convencional con móvil (propiciando el auge del envío de SMSs y posteriormente la tv móvil), plataformas digitales e Internet, al mismo tiempo que las vivencias de la casa de Guadalix de la Sierra inundan todos los espacios de los diferentes canales de Mediaset con resúmenes, debates, entrevistas, polémicas…

Sin duda, Gran Hermano ha encontrado en Internet, y como consecuencia a la televisión conectada, a unos aliados perfectos. La edición actualmente en antena puede seguirse las 24 horas a través de Mitele, la plataforma de televisión en línea de Mediaset España.

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